Darles cabida a las apuestas audaces
La importancia de la creatividad en las empresas
David Somoza Mosquera
La creatividad no es un rasgo exclusivo de algunas personas, sino que es una cualidad innata de todos los seres humanos. Sin embargo, hay quienes poseen un pensamiento creativo más desarrollado que otros por su tipo de personalidad, las influencias del entorno o si han buscado mejorar aquellos hábitos o aptitudes que les permiten ser, precisamente, más creativos.
Ahora bien, ¿qué es ser una persona creativa? A grandes rasgos podríamos decir que una persona creativa se destaca por su originalidad, su poder de adaptación, su innovación y su curiosidad. En otras palabras, es capaz de arriesgarse imaginando opciones diferentes para crear ideas o cosas, así como solucionar problemas o desafíos.
De hecho, arriesgarse es un rasgo distintivo de la creatividad y, sin duda alguna, conlleva riesgos: existe la posibilidad de equivocarse. Y esa es una de las razones por las cuales en el plano personal la gente muestra más sus habilidades creativas que en el mundo laboral.
Pero eso no quiere decir que para las empresas no sea importante la creatividad. Todo lo contrario, es un factor clave y, además, un elemento fundamental que debe estar presente en todo equipo de trabajo.
Para producir nuevas ideas, las compañías tienen que observar, escuchar, no perder nunca la curiosidad y ser audaces, lo cual está relacionado con la creatividad y la innovación. Dos elementos que diferencian a un negocio y le procuran una ventaja competitiva en el mercado.
Si bien el informe “Creatividad transformadora para los negocios” de la consultora española LLYC es de finales de 2021, varios de los planteamientos allí contenido no han perdido vigencia, pues evidencian lo importante que es para una compañía la creatividad.
Aunque se centra en el área de marketing -fueron consultados más de un centenar de directores de mercadeo de España, Argentina, Brasil. Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Perú, Portugal, República Dominicana y Estados Unidos- sus resultados son relevantes para cualquier negocio.
El portal Marketing News, donde fue publicado el estudio, señala que “para 90% de los encuestados, la importancia de la creatividad ha aumentado claramente en el área de marketing durante el último año, un cambio al que han contribuido la pandemia, la digitalización y la sobreinformación”.
En lo que se refiere al impacto en las distintas áreas de una empresa, la mayoría de los consultados considera que la creatividad tiene un gran impacto, tanto en el modelo de negocio como en los procesos necesarios para desarrollarlo.
También aseguran que “la creatividad tiene un impacto alto en el desempeño del producto, en la comunicación de marca y en la interacción con el cliente… La creatividad ha aumentado claramente su importancia en el último año. Crece su relevancia especialmente en las disciplinas de comunicación digital y marketing de influencia, y tiene un impacto alto en el modelo de ingresos y en los procesos de negocio”.
Para impulsarla “es clave el trabajo en equipo, la diversidad y la formación e investigación, y sus mayores enemigos son la presión por el resultado a corto plazo y el miedo al riesgo”, es una de las principales conclusiones del estudio y que, como puede verse, es aplicable hasta el día de hoy.
Pero no solo la falta de motivación de los equipos puede suponer un impedimento para el desarrollo de la creatividad en las empresas. Están las otras barreras que se describen en la encuesta y que un negocio no debería perder de vista.
Me refiero a estas cifras: 75,8% de los consultados dijo que la presión por el resultado a corto plazo es el mayor obstáculo al que se enfrentan a diario a la hora de ser creativos; 74,7% opinó que es el miedo al riesgo; 54% afirmó que era por falta de tiempo; 29,8% señaló que era por falta de recurso y 27,5% consideró que la causa era la falta de confianza.
Así que lo recomendable para lograr un ambiente creativo dentro de una compañía es, aunque pueda generar cierta aprehensión, darle también cabida a las apuestas audaces, confiar en la propia capacidad para hacer bien el trabajo y, sobre todo, huir del resultado inmediato.
Las empresas con más personas creativas se traducen en empleados más productivos, clientes más satisfechos y son más exitosas.