La tecnología, una apuesta de futuro de las empresas
David Somoza Mosquera
Hace años la tecnología dejó de ser ciencia ficción para convertirse en una realidad palpable, que permea cada vez más nuestra vida personal y social. Lo mismo ocurre en el ámbito empresarial, donde se ha convertido en un ingrediente imprescindible para la continuidad de las operaciones y seguir siendo competitivos en el mercado.
Las empresas que promueven inversiones en tecnología e innovación se colocan a la vanguardia y miran hacia el futuro. ¿Cómo? Logran transformar sus negocios, incrementan sus mercados y ofrecen productos y servicios nuevos que satisfacen a consumidores y usuarios cada vez más exigentes.
En otras palabras, son más rápidas y eficientes. Pueden lograr mejores resultados que aquellas que son más conservadoras, pues las nuevas tecnologías permiten que los efectos sean visibles de forma bastante expedita.
Además, la tecnología ha llegado para resolver los problemas y eliminar las barreras de las organizaciones a través de sistemas innovadores. Por ello, hay que tener claro que no se trata de la simple introducción de nuevas máquinas, sino que debe ser un cambio en la mentalidad empresarial.
Es necesario encaminar a la organización hacia un modelo en el que la tecnología está al servicio del negocio para una mejor eficiencia y toma de decisiones. Sin embargo, las innovaciones que surgen hay que adaptarlas a los negocios de acuerdo con sus características y necesidades.
Son varios los beneficios que la tecnología trae para el sector productivo, como lo han esbozado especialistas en la materia. Presentamos algunas de las ventajas que ofrece:
-Se potencia la comunicación. Cuando se cuenta con un buen respaldo tecnológico se rompen las barreras de comunicación entre empleados y ejecutivos. Es también útil para mejorar la comunicación con proveedores, clientes y/o aliados comerciales.
-Generación de poder de mercado. Las empresas, al lograr que consumidores adquieran sus nuevos o mejorados productos y servicios, no solo consiguen el retorno de sus inversiones, sino que además se les abren las puertas a otros mercados. Se convierten en pioneros en la producción de esos bienes.
-Mayor competitividad y/o productividad. Esto genera crecimiento para las compañías, asó como mejores niveles de ingreso y bienestar. También logran incrementar su participación en el mercado.
-Reducción en costos. A través del uso de la tecnología, se pueden mejorar los procesos, haciéndolos más amigables, y estrategias de comercialización que disminuyen costos de producción al utilizar, por ejemplo, nuevos materiales que producen mayores ventajas.
En resumen, la incorporación de las nuevas tecnologías son una apuesta de futuro de las empresas, pero deben plantearse desde el presente mediante estrategias relacionadas con el proceso de producción, gestión, distribución, ventas, marketing o comunicación.
